El objetivo de este artículo es presentar las ventajas que ofrece el disponer de los servicios de un operador minero experimentado en una explotación, en vez de adquirir maquinaria en propiedad que realice las labores de movimiento de tierras, perforación y voladura.

Para ello el departamento de oficina técnica de la compañía Movitex, el cual posee una amplia experiencia en la operación de todo tipo de explotaciones mineras, enumera dichas virtudes, las cuales se pueden diferenciar en ventajas a nivel económico y ventajas a nivel operacional.

Diego Sánchez, director general de Movitex.

Se comienza con las ventajas económicas que ofrece la contratación de un operador minero en una explotación.

VENTAJAS ECONÓMICAS

VENTAJAS FINANCIERAS

La inversión media en un equipo de movimiento de tierras, como puede ser el compuesto por una perforadora, una excavadora de cien toneladas, tres dúmperes y un bulldozer, ronda los tres millones de euros. El invertir este capital en un equipo de maquinaria minera hace que no se pueda disponer de dicho montante para invertirlo en aquello que nadie puede hacer por la empresa, como pueden ser mejoras en la planta productiva o adquisición de reservas mineras. Esta situación se ve solucionada al contar con un operador minero que realice la operación, sin que se tenga la necesidad de tener que apalancar ese dinero en la adquisición de maquinaria y pudiendo disponer del mismo para otras inversiones.

En el caso de que las inversiones que acomete la propiedad se realicen con financiación bancaria, el equipo financiero de la propiedad tiene la obligación de administrar bien este recurso, ya que hoy en día es muy limitado debido al difícil acceso al crédito que ofrecen las entidades financieras. El realizar inversiones tan cuantiosas como son las inversiones en maquinaria es una forma de gastar la limitada financiación en recursos que se puede conseguir por medio de una contratación de las labores mineras a un operador experimentado.

Otra ventaja a resaltar en la contratación de un operador minero es el plazo de pago que se acuerda entre el operador y la propiedad de la explotación. Al negociarse el transcurso de un plazo de tiempo desde el momento en el que se realizan los servicios y el momento en el que se recibe el pago, el cual incluso puede llegar a ser superior al que la empresa cobra a sus clientes por la producción realizada por el operador minero, permite utilizar temporalmente estos recursos financieros para finalidades distintas, ya que la propiedad de la explotación no va a tener que soportar pagos al contado como son los costes del personal de obra, suministros, intereses financieros, alquileres y cualquier otro gasto no previsto, que sí tendría que soportar el cliente en el caso de que la maquinaria fuese propia.

COSTES PROPORCIONALES A LA PRODUCCIÓN

Una de las mayores ventajas que existen al contratar a un operador minero consiste en que cuando la propiedad adquiere maquinaria la amortización de los equipos se convierte en un coste fijo independiente de la producción. En el caso de que la propiedad contrate los servicios de movimiento de tierras, este coste se convierte en un coste variable proporcional a la producción que se realice en la explotación y no provoca gastos inesperados por situaciones de parada de explotación, averías, bajas laborales o bajos rendimientos, como sucede en el caso de tener maquinaria en propiedad.

De la misma forma, en el caso de puntas de producción o caída de la misma, es el operador minero el que soporta dichas situaciones, manteniendo el precio ofertado por tonelada o metro cúbico que se haya acordado.

MEJOR PLANIFICACION Y CONSECUCION DE LOS PRESUPUESTOS ANUALES

La necesidad de realizar un presupuesto económico periódico sobre la futura marcha de la explotación y de la compañía en general es hoy en día un método de organización y seguimiento muy común en todas las empresas. La realización y ejecución de este presupuesto se complica al contar con maquinaria en propiedad, ya que todos los imprevistos que surgen sobre los equipos de movimiento de tierras, como averías, bajas producciones, así como bajas laborales, hacen que el presupuesto se vea afectado negativamente y de una forma imprevisible.

Al contratar los servicios de un operador minero, este proporcionará un coste fijo por metro cúbico o tonelada movida, lo cual permitirá diseñar el presupuesto de costes de la compañía de una forma mucho más exacta y evitar desviaciones inesperadas que hacen que no se pueda cumplir el presupuesto anual.

VENTAJAS FISCALES

Desde el punto de vista fiscal, el contratar a un operador minero es muy ventajoso, ya que la repercusión del gasto de los servicios del operador en el impuesto de sociedades se realiza en el ejercicio en el que se produce la extracción y venta del mineral que el operador ha realizado. A efectos prácticos esto significa que se tributará por la diferencia entre los ingresos y los gastos en el ejercicio fiscal en el que se producen ambos, mientras que en el caso de que la explotación posea maquinaria en propiedad, el importante coste de amortización de los equipos se dilata en distintos ejercicios, pudiendo no coincidir el coste de amortización con el ejercicio fiscal donde se produzcan la mayoría de los ingresos por la venta del mineral, generando esto una situación no deseada en la cuenta de resultados y pudiendo restar prestigio a la compañía delante de las entidades financieras debido a dicho decalaje.

REDUCCION DE RIESGOS POR INVERSION

La última crisis que todavía se está sufriendo ha demostrado lo rápido que se pueden producir los cambios de tendencia económica y la importancia crucial que tiene para las empresas poder adaptarse rápidamente a la evolución del ciclo económico. Si llegado un cambio de tendencia severo, como el que se sufrió en el año 2007-2008, la compañía está soportando una fuerte inversión en equipos mineros, esto puede hacer que las posibilidades de salvar la crisis económica con éxito disminuyan. En el caso de que sea el operador minero quien aporte su maquinaria a la explotación, recae sobre el operador el soportar la amortización de los equipos durante el periodo de crisis o ralentización.

Por otro lado, al contratar la propiedad los servicios de un operador, y ante la llegada de un cambio de tendencia económica, la propiedad puede ajustar la demanda de servicios del operador en función de sus necesidades de producción, lo cual hace que sus costes fijos no se disparen en época de baja producción, como sería el caso de poseer equipos mineros en propiedad.

VENTAJAS OPERACIONALES

OFICINA TECNICA A DISPOSICION DEL CLIENTE

La experiencia que posee el personal técnico del operador minero, al haber trabajado en distintas explotaciones, es amplia e importante, pudiendo dar una visión distinta al gabinete técnico de la propiedad, aportando los conocimientos adquiridos durante años en diversas situaciones relacionadas con la operación minera y pudiendo ayudar a ahorrar tiempo y dinero al aportar soluciones a problemas que ya han sido experimentados con anterioridad por dicho operador minero.

Esto representa una ventaja importante para el cliente, llegando incluso a poder confiar la gestión integral de la operación al operador y el cliente centrarse en su negocio principal.

PREVENCION DE RIESGOS LABORALES

La formación continua de la plantilla con la que cuenta el operador minero y su especialización en la operación hace que el nivel de conocimiento sobre riesgos laborales y su prevención por parte del personal sea alto, ayudando esto notoriamente a evitar situaciones de peligro en la operación minera.

Por otro lado, la mayoría de los operadores mineros poseen su propio departamento de prevención de riesgos laborales, como es el caso de Movitex, el cual tiene un grado de especialización en minería muy superior a la gran mayoría de las instituciones externas que ejercen de formadores en materia de prevención.

El que el operador minero posea un departamento propio de prevención de riesgos laborales hace que la vigilancia realizada sobre la correcta ejecución de los trabajos sea continua, ya que es el único objetivo de este departamento: formar y prevenir.

NECESIDAD DE UNA PLANTILLA MENOR

La flexibilidad que se produce con la contratación de un operador minero en su explotación, en cuanto a disposición de personal se refiere, permite que los gastos de plantilla de la propiedad disminuyan notablemente, ya que es el operador minero el que aporta dicho personal cuando sea necesario, respondiendo a puntas de producción, sustituciones por periodos vacacionales, paradas por causas climatológicas o bajadas de ventas.

El operador minero puede afrontar con diversidad de recursos las variaciones de personal que se producen en una explotación, ya que posee una amplia plantilla de operadores de maquinaria, una extensa base de datos de trabajadores especializados y prolongada experiencia en la contratación de personal minero, siendo todo esto una ventaja para la propiedad de la explotación.

De la misma forma, el personal técnico especializado necesario para el mantenimiento y reparación de la maquinaria, es decir, los mecánicos, pasa a ser cargo del operador minero, resultando esto un importante punto, ya que es un tipo de personal muy difícil de encontrar y del que depende gran parte de la consecución de los objetivos marcados de producción.

Carro realizando la perforaciónVERSATILIDAD A LA HORA DE DISPONER DE UNA AMPLIA GAMA DE MAQUINARIA

La amplia flota de maquinaria que dispone un operador minero especializado hace que a la hora que la explotación necesite equipos de distintas características, aunque sea por poco tiempo, el operador minero pueda proporcionarlos. Si esta situación se produjese siendo la propiedad quien realizase la operación del movimiento de tierras, sería un problema para ella, ya que la disposición por poco tiempo de equipos mineros de movimiento de tierra en alquiler supone un coste muy elevado, el cual se evita gracias a la disponibilidad de maquinaria que posee el operador minero en su parque.

FOCALIZACION EN LA ACTIVIDAD PRINCIPAL POR PARTE DE LA PROPIEDAD DE LA EXPLOTACIÓN

La correcta ejecución del movimiento de tierras necesario en una explotación minera conlleva un grado de dedicación muy importante. Cuando la actividad minera la asume totalmente la propiedad, hace que tenga que dedicar una serie de recursos propios a coordinar dicha actividad, añadiendo relevantes labores al trabajo diario del personal técnico y directivo y provocando que parte del equipo desvíe una cantidad de su tiempo de la actividad principal de la compañía, que es la optimización del proceso de fabricación y comercialización del producto final.

La participación de un operador minero especializado en la explotación hace que este asuma gran parte de la problemática diaria del yacimiento, pudiendo liberar tiempo al personal técnico y directivo de la propiedad para dedicarse a lo que nadie puede hacer por ellos.

RESPETO POR EL MEDIO AMBIENTE

El parque de maquinaria de un operador minero tiene la necesidad de una renovación constante para ofrecer a sus clientes la máxima disponibilidad de sus unidades. Esto hace que el operador disponga de maquinaria de última generación, la cual cuenta con los últimos avances tecnológicos que ofrecen los fabricantes y entre ellos tiene gran relevancia el respeto al medio ambiente y la reducción de emisiones nocivas a la atmosfera.

La maquinaria de última generación cumple con una estricta normativa sobre emisiones, por lo que el disponer de este tipo de unidades en su explotación hace que su operación minera sea más ecológica. De la misma forma, los mantenimientos más prolongados que presenta este tipo de maquinaria, tienen como resultado que la generación de residuos contaminantes se produzca en menor cantidad que en maquinaria más antigua.

En definitiva, la contratación de un operador minero para la extracción mineral o para el movimiento de estéril es, como se ha visto anteriormente, absolutamente positiva, por muchos aspectos, frente a la maquinaria en propiedad.

Información de Rocas y Minerales